Acostumbrada a tanta locuacidad, me deja perpleja tanta frase hecha en su afán por mostrar determinación y contundencia en sus primeras manifestaciones. No deja de ser curioso el estilo popular con el que nos deleitaron... no vaya a ser que no quedara claro. Y así María Dolores de Cospedal se aferró a "que cada palo aguante su vela", Rajoy enarboló el "no me temblará la mano" si se descubren irregularidades y Esperanza Aguirre optó por llevar la investigación hasta el final "caiga quien caiga" (tal vez en homenaje al programa del que, en tantas ocasiones, fue protagonista).
Y tras las primera reacciones, los primeros acuerdos. Sólo algunos apuntes... En la Reunión del Comité Ejecutivo Nacional del PP se acuerda una "investigación interna profunda que será sometida a una auditoría externa" desde que se creó el PP en 1989. Y yo me pregunto: ¿Lo que no se ha hecho en 23 años se va a hacer ahora? Respecto a los famosos sobres, Cospedal afirma que "Todo el mundo niega tajantemente que esto se produjera". Y me sigo preguntando: Quien recibe dinero negro ¿lo va publicando? Y llegamos, al tan traído y llevado, pacto contra la corrupción entre todos los partidos -que aunque ya me pronuncié al respecto en Los "patos" de la corrupción-, viene a colación Aristóteles y su Principio de no contradicción: "Nadie puede creer al mismo tiempo y en el mismo sentido una proposición y su negación".
No sé por qué no me sorprenden algunos comportamientos, al fin y al cabo, estos y otros políticos, están en la misma línea de actuación de algunos empresarios. No saben nada, no les consta, pues deberían saber lo que pasa en "su empresa" o es que ¿no entra en el ámbito de sus responsabilidades?
Por lo tanto, y puestos a seguir con frases hechas... "que cada uno entienda lo que quiera" porque "a frases hechas oídos sordos" ¿o era "a palabras necías oídos sordos"?
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