Qué alivio, los 13 errores de las propiedades atribuidas a la infanta Cristina no son de Hacienda. Sólo 2, los otros 11 se atribuyen a registradores y notarios. Como t@nteo no está mal. Como explicación, además de tardía, inquieta igual o más que la callada por respuesta.
Si el Gobierno no tiene explicaciones para nada, no iba a ser menos en este asunto. Y Miguel Ferre, el secretario de Estado de Hacienda, no tiene nada mejor que hacer que achacarlo al tratamiento manual de los datos de un funcionario ya jubilado. Fácil. Se produjo un "deslizamiento" en los dígitos imposibles de un DNI (14). Simple y sencillo. Tratándose de la idea que hasta ahora se tenía de la Hacienda Pública. Difícil de creer. Unido a los 11 errores de notarios y registradores. Más difícil todavía. Todo "casual". Imposible por estadística. Ferre dice que "no cabe lugar para especulaciones". Salto mortal. Ante tamaña concatenación de aciagos hechos lo que no cabe es lugar para otra cosa.
No obstante, Cristóbal Montoro, ministro de Hacienda, no escatima en reconocimientos al significar a la Agencia Tributaria "por su funcionamiento", como "una de las grandes instituciones del Estado". Lo estamos viendo.
Los ímprobos esfuerzos por explicar algo que, según Montoro, se trata de "un error que no tiene mayor alcance", ya es un error en sí mismo por tanto empeño, al tiempo que pretende restarle importancia.
Cómo será que hasta el juez José Castro, instructor del "caso Nóos" ha pedido a Hacienda explicaciones "comprensibles y documentadas".
Mientras, como el resto de los contribuyentes parece que no somos merecedores de, por ejemplo, ¿transparencia?, seguiremos viendo fantasmas volando, pero sin sábana. Las traiciones del subconsciente.
© 2013
Cabe la posibilidad de que el supuesto error, como no, de un jubilado, no sea tal error sino más bien algo pensado y mas que pensado para tapar otro agujero negro de los muchos que tenemos en este nuestro querido país.
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