martes, 2 de julio de 2013

La bomba purificadora de Bárcenas

Entre alcanzar el Gobierno de España con mayoría absoluta y gobernar para una minoría existe un abismo de corrupción que, por mucho que calle la cúpula y la no cúpula, debería haber succionado a más de un miembro del PP, al PP al completo o al Gobierno en pleno, solamente por la falta de respuestas. Es inadmisible se mire por donde se mire. En el Gobierno de un país, más.

“Absolutamente abochornada” por los asuntos de corrupción de su partido, dice estar Esperanza Aguirre a su llegada a Génova, donde se celebraba la reunión del Comité Ejecutivo Nacional del PP. ¿Y?

María Dolores de Cospedal y adyacentes continúan con la “total tranquilidad” a la que nos tienen acostumbrados. Menuda novedad. Con la impasibilidad que les caracteriza ¿van a decir ahora que están intranquilos por el ingreso en prisión de Bárcenas…?

Y la frase estrella de Mariano Rajoy, presidente del Gobierno: “Seguiremos colaborando con la Justicia”. Faltaría más.

¿Eso es todo lo que se les ocurre?

Últimamente a muchos españoles -voten a quien voten- se les escucha una expresión no por popular menos lapidaria: “Qué peste, qué peste, qué peste”, más contundente que las frases consigna del PP. La repetida retahíla -que hiciera famoso el gnomo de un spot publicitario- se ha convertido, elevada a la enésima potencia, en la preferida de los comunes mortales ante el lodazal en el que se halla inmerso el partido gobernante; no otro, que también el PSOE (la última, Magdalena Álvarez, imputada por el caso de los ERE…). Tal es el hedor que desprenden los políticos que no hacen política.

Son tantos los frentes que tiene abierto el PP (ahora se suma Carmen Rodríguez Flores) que es comprensible que no den abasto. Y entremedias el oportunista del expresidente Aznar y el trepa de Gallardón, a quien se le viene viendo el plumero desde tiempo ha.

Ante este sinvivir agónico, para tranquilidad de todos, incluido el PP que se alegrará de finalizar con “especulaciones” y “dimes y diretes”, como apuntaba Cospedal, la opción de que Bárcenas definitivamente haga “apretar el botón” de la supuesta bomba parece la más sana. Si hay que proceder a la explosión, se hace y punto.
© 2013

2 comentarios:

  1. Realmente la cúpula del PP se ha estado enriqueciendo a base de tramas corruptas. Y desde mi punto de vista lo que ahora sabemos no es mas que la punta del iceberg de la podredumbre que anda por ahí sumergida.Los anteriores tampoco es que estén muy limpios, pero bueno no hay que perder la esperanza, siempre hay alternativas.

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  2. Esperanza Aguirre lo ha dicho muy clarito: "No es necesario esperar a la Justicia, los partidos tienen mecanismos para poder cortar de raíz la corrupción". Por lo tanto, los partidos (PSOE, PP o cualquiera en el que se dé) son responsables. La postura del PP (partido gobernante, no me cansaré de decirlo por la gravedad que conlleva) en el caso Bárcenas es inaudita, echando balones fuera para la justicia. Muy cómodo. Al igual que la de Aguirre como si no fuera miembro del PP.

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